Ben Magec–Ecologistas en Acción celebró su XVII Asamblea Federal, que tuvo lugar en el municipio grancanario de Firgas.

En ella, además de exponerse un balance de las actividades que ha realizado la Federación (entre otras muchas, con la organización de las manifestaciones ciudadanas más importantes de la historia de Canarias), se desarrolló un ejercicio de reflexión en el que, con la participación de todos los colectivos federados asistentes y de la activista y experta Yayo Herrero, miembro de Ecologistas en Acción, se expusieron las bases del trabajo futuro de la organización. Este trabajo, que deberá perfilarse en próximos encuentros, deberá conseguir dar impulso a las luchas locales de las organizaciones ecologistas de toda Canarias. En este sentido, se encomiendó al nuevo Consejo Federal abrir un proceso donde, colectivamente, se decida cómo ha de estructurarse internamente la organización en consonancia con las conclusiones extraídas del debate mantenido en esta Asamblea.

Además, se aprobó la incorporación de Abeque en la Federación, un colectivo tinerfeño radicado en la Isla Baja, y que ha trabajado intensamente en la erradicación de la planta invasora rabo de gato en zonas muy sensibles como el Parque Rural de Teno. También se dejó abierta la posibilidad de que otro colectivo que ha mostrado su interés en participar, se integre provisionalmente en la Federación tras su aprobación por parte del Consejo Federal.

Como es preceptivo, se renovaron los órganos de coordinación y dinamización federales, procurando garantizar la máxima participación de todos los grupos para conseguir estrechar aún más los lazos y amplificar el eco de las luchas en toda Canarias.

Se aprobó un régimen de incompatibilidades que procurará preservar la independencia de la Federación respecto a cualquier otra entidad (partidista o de cualquier otro tipo) que pudiera comprometer su imagen, su planteamiento o sus actividades.

También se desarrollaron unas jornadas abiertas e integradoras con otros colectivos ecosociales, con el objetivo de estrechar lazos y aunar esfuerzos del movimiento ecologista canario en su conjunto. En ella, se abrió un debate sobre los principales problemas ambientales en el actual contexto socio–político.

Por último, se prefijaron algunas de las campañas que centrarán la atención del trabajo federal, y, aunque abierta a la atención de cualquier tema de actualidad o contingencia, se hizo mucho énfasis en estrechar la vigilancia a la desregulación normativa que está sufriendo el territorio, y en participar activamente en la lucha contra el cambio climático. En este sentido, se señaló la necesidad de incidir en las propuestas por un cambio de modelo socio-económico que aleje a Canarias del papel que está desarrollando como nexo de conflictos internacionales y gasolinera en el Atlántico, y con planteamientos dirigidos a convertir a las islas en un ejemplo de sostenibilidad a través de la autosuficiencia energética y alimentaria.