Ecologistas en Acción lleva desde el principio del siniestro exigiendo a las distintas administraciones que divulguen unas pautas de comportamiento claras y orientativas para que las personas que viven cerca del foco del incendio puedan reducir su exposición a los contaminantes. Esta importante información no se ha facilitado de forma generalizada ni con el énfasis debido, quizá para no trasmitir sensación de alarma. Pero lo que resulta claro es que la población de la zona está alarmada y desorientada. Por ello, con el aval de la cátedra de Toxicología y Salud Medioambiental de la Universidad Rovira i Virgili, Ecologistas en Acción lanza hoy unas recomendaciones dirigidas a paliar esta injustificable carencia
- Recomendaciones para protegerse de la contaminación
Hace ya diez días que se declaró el incendio. Desde entonces, las distintas administraciones han puesto más énfasis en trasmitir un mensaje de tranquilidad que en informar de las posibles consecuencias del siniestro sobre la salud pública. Y dentro de esta estrategia hay una información muy importante que no se está facilitando de manera generalizada: las pautas de actuación para que las personas que viven en la zona próxima al incendio puedan minimizar o evitar su exposición a las sustancias tóxicas.
Por este motivo, Ecologistas en Acción hace públicas unas recomendaciones para que la población de los alrededores del vertedero de neumáticos de Seseña-Valdemoro pueda seguir comportamientos de autoprotección.
La organización ecologista considera que la información que han ido trasmitiendo las distintas administraciones ha sido contradictoria: un día se abren los colegios, otro se cierran; se afirma que el aire es normal, pero al poco se recomienda que la gente permanezca confinada en sus viviendas; se mandan mensajes tranquilizadores, mientras a la gente le pican los ojos y la garganta. Pero también esta información ha sido escasa y poco clara, quizá en un intento de que parezca que la situación está bajo control, cuando en el fondo la calidad del aire que se respira depende de la dirección del viento.
En las distintas reuniones y asambleas de vecinos en las que ha participado esta organización ecologista ha detectado un fuerte desconocimiento de pautas de actuación. La gente ignora cosas básicas como qué tipo de mascarillas son más eficaces, de qué manera debe limpiar el hollín de sus casas o si los niños pueden jugar en la calle. Al mismo tiempo, todos los estudios científicos que se han divulgado estos días concluyen que en las zonas más próximas a la emisión de humo las consecuencias para la salud de las personas y para el medio ambiente son negativas.
Es por este motivo que Ecologistas en Acción se decide a hacer públicas estas recomendaciones, que han sido revisadas y cuentan con el aval de José Luis Domingo Roig, catedrático de Toxicología y Salud Medioambiental de la Universidad Rovira i Virgili (Tarragona), uno de los mayores expertos mundiales en relación a esta temática, editor de las revistas Environmental Research y Food and Chemical Toxicology.
Reducir la exposición de las personas a los productos tóxicos del incendio de neumáticos de Seseña-Valdemoro
Estas recomendaciones las realiza Ecologistas en Acción tratando de suplir, con sus reducidos medios, las carencias de las diferentes administraciones, que no están aportando estas importantes indicaciones de manera generalizada como sería necesario para que las pongan en práctica todas las poblaciones que puedan verse afectadas por el humo del incendio [1].
- Recomendaciones en A3 para imprimir
Las recomendaciones han sido revisadas y cuentan con el aval de la cátedra de Toxicología y Salud Medioambiental de la Universidad Rovira i Virgili (Tarragona).
Grupos de población más sensibles
- Personas con enfermedades respiratorias, EPOC o cardiovasculares
- Personas ancianas
- Niñas y niños
- Mujeres embarazadas
- Personas quimicosensibles
Todas ellas deben valorar si siguen las siguientes recomendaciones a la población general, o bien optan por desplazarse a zonas de aire limpio.
Recomendaciones para la población general
En las zonas que puedan estar afectadas por los gases del incendio, en especial cuando haya humo o huela a goma quemada:
- Limite el tiempo que pasa al aire libre.
- Evite el ejercicio físico al aire libre.
- Las personas con asma, EPOC u otros trastornos pulmonares crónicos, deben seguir las recomendaciones específicas de su médico.
- Si aparecen síntomas de enfermedades respiratorias o cardiovasculares que pudieran estar relacionados con el exceso de exposición al humo, incluyendo tos persistente, falta de aliento o dificultad para respirar, silbidos, opresión en el pecho o dolor, palpitaciones, náuseas, fatiga inusual o mareo, póngase cuanto antes en contacto con su centro de salud.
Conviene insistir en que todos los estudios sobre este tipo de siniestros recomiendan no residir en las zonas más próximas al fuego mientras este no se extinga.
Recomendaciones si llega el humo desde la zona del incendio a su vivienda
- Mantenga las puertas y ventanas cerradas, selle las juntas y grietas tanto como sea posible (p.ej. con cinta adhesiva).
- Si usa el aire acondicionado seleccione el modo de recirculación interior tanto en el hogar como en el coche, o utilice ventiladores. No use sistemas de ventilación que succionen aire exterior y lo introduzcan en la casa (o en el coche).
- Dado que no se va a poder ventilar mucho la vivienda, evite las fuentes internas de contaminantes, como el humo del tabaco, calefacción con estufas de leña y calentadores de queroseno, freír o asar alimentos, pasar la aspiradora o el uso de pinturas, disolventes, y adhesivos.
- Tenga suficiente suministro de medicamentos que vaya a necesitar durante algunos días.
- Disponga de suministro de víveres no perecederos que no requieren cocción.
Además, es conveniente
Tome medidas para reducir el riesgo que provoca el humo del incendio.
- Controle los informes locales de calidad del aire. Escuche y vea las noticias o advertencias para la salud sobre el humo. Preste atención a los mensajes de salud pública acerca de las medidas de seguridad que debe tomar.
- Para limpiar el polvo y hollín que provenga del incendio utilice trapos húmedos y deshágase de ellos (lo ideal sería que el Ayuntamiento habilitara un sitio donde verterlos). Lo fundamental en todo caso es evitar que ese polvo se levante y pueda ser respirado.
- No confíe en máscaras contra el polvo para su protección. Las mascaras de papel para el polvo que se encuentran normalmente en las ferreterías están diseñadas para atrapar partículas grandes, tales como serrín. Estas máscaras apenas protegen los pulmones de las pequeñas partículas que hay en el humo de estos incendios. Deben usarse mascarillas específicas con filtro para partículas de alta eficacia (P3), también denominadas FFP3 NR, pero sin olvidar que la protección no es ni mucho menos completa.
Precauciones de las personas que trabajan en la limpieza de calles o en zonas afectadas por el hollín
- Deberán llevar protección ocular adecuada, máscaras de partículas de calidad, y mono para evitar el contacto con la piel.
Limpieza de calles y zonas públicas
- Si se realiza mediante sistemas de baldeo, habrá que poner especial cuidado en el tratamiento y descontaminación de las aguas residuales y, en todo caso, evitar la reutilización del agua para parques o riegos. Del mismo modo, se deben evitar los chorros a presión que levanten y esparzan el polvo y hollín depositado en el suelo.
- Si se realiza con sistemas de aspiración, los equipos deberán contar con los filtros adecuados para no recircular las partículas en el aire.
[1] Esta información está extraída de varias fuentes, una de las principales es Humo de incendios forestales. Una guía para los funcionarios de salud pública (del gobierno estadounidense)
