Ecologistas en Acción de Ciudad Real exige a Antonio Lucas Torres, Alcalde de Campo de Criptana y Portavoz del PP en la Diputación Provincial de Ciudad Real, su dimisión como servidor público al mentir en relación con la ZEPA Mancha Norte y los planes de gestión de las ZEPA de aves esteparias.

Ecologistas en Acción denuncia también que está actuando como lobista de ASAJA, soliviantando a los agricultores contra la Red Natura 2000, mintiendo y confundiendo sobre los valores ornitológicos de la parte norte del municipio de Campo de Criptana y haciendo dejación de sus funciones como representante público al incitar al incumplimiento de la legislación autonómica, estatal y comunitaria en materia de conservación de la naturaleza.

Para nosotros, afirmaciones como que «los agricultores están por encima de las aves y de los ecologistas» son impresentables, propias de un demagogo que incita al enfrentamiento y a la confusión, y que está ocultando a los ciudadanos que en el momento de aprobarse la demarcación de esta zona ZEPA en el año 2005 (Decreto 82/2005 CLM) él era el concejal de Medio Ambiente de su pueblo sin que de su boca saliera entonces, cuando era el momento, ni una sola argumentación en contra.

Ecologistas en Acción quiere recordar que la entrada de España en la Unión Europea obliga a nuestro país a cumplir con la legislación comunitaria, en este caso en materia de conservación de especies y espacios naturales, siendo la Red Natura 2000, con sus ZEPA y ZEC, la punta de lanza de las estrategias de conservación de la biodiversidad y de la naturaleza de la UE.

La identificación de la ZEPA Mancha Norte como ZEPA deriva de un estudio científico independiente encargado en el año 1994 por el Gobierno Regional al Museo Nacional de Ciencias Naturales adscrito al CSIC, bajo la dirección de la Dra. Carmen Martínez, estudio que sirvió de base para el diseño de la red de espacios a incluir como ZEPA para la conservación de las aves esteparias en Castilla-La Mancha y para elaborar el primer programa de medidas agroambientales para la conservación de las aves esteparias.

Una vez identificada de manera científica la parte norte del municipio de Campo de Criptana como lugar de alto valor ornitológico para las aves esteparias e incluida en Red Natura 2000, hay que puntualizar que un espacio que tiene que proteger a estas aves, entre las que se encuentran censadas las avutardas, sisones, gangas, ortegas y alcaravanes, entre otras muchas especies, tiene que organizar convenientemente la actividad agrícola, especialmente en lo que tiene que ver con las prácticas de regadío y gestión de cultivos. Así lo avalan todos los trabajos y dictámenes científicos a nivel internacional, estatal y regional, que concluyen que la intensificación de la actividad agraria vía la transformación a regadío es un factor determinante en el declive de las especies esteparias autóctonas.

Curiosamente no ha habido quejas por parte de agricultores desde la declaración de las ZEPA hasta que en algunas de ellas empezaron a proliferar los viñedos en espaldera (5.300 hectáreas) amparándose en una orden de 2012 del gobierno de Cospedal que eximía de evaluación de impacto ambiental muchas de esas plantaciones y que ha sido declarada ilegal por sentencia del TSJ de Castilla-La Mancha.

Frente a la actitud frentista del Lucas Torres, Ecologistas en Acción de Ciudad Real, tiende la mano a los agricultores, poniéndose a su disposición para aclarar los malentendidos provocados por ASAJA y el Alcalde de Campo de Criptana y exige a estos últimos que se sienten a trabajar en pro de los agricultores sin poner en cuestión a las aves, la ZEPA y los ecologistas, quienes, por cierto, acaban de reclamar a nivel regional la inmediata puesta en marcha de las ayudas de 40 millones de euros incorporadas al PDR de Castilla-La Mancha para compensar a los agricultores con cultivos en zonas ZEPA. «Lo que tienen que hacer ASAJA y Lucas Torres es defender en Europa, en España y en Castilla-La Mancha que se premie y se ayude de forma efectiva y real por las buenas prácticas agrícolas desarrolladas tradicionalmente en Campo de Criptana por los agricultores, prácticas que han permitido que se conserve hasta nuestros días una de las mejores zonas de aves esteparias de la región». En este sentido las asociaciones «ASAJA y Lucas Torres son un peligro para el futuro de los agricultores y no la ZEPA, las aves y los ecologistas», han afirmado desde Ecologistas en Acción.